Presentamos la Ducati RAD 02 Imola, la sublime interpretación de lo que debe ser una Cafe Racer del siglo XXI. Tiene genes italianos por todos sus costados aunque su padre es español, el preparador Radical Ducati con sede en Madrid, cuyo equipo ha sido autor de algunas de las preparaciones más bellas y espectaculares que pueden verse sobre la base de una Ducati.
El modelo que nos ocupa, la Imola Cafe Racer, forma parte de la gama RAD 02, en la que podemos encontrar Nakeds, Superbikes o como en este caso, una espectacular Cafe Racer homenaje directo de la mítica 750 Imola Desmo, con la que Paul Smart ganó la Imola 200 en 1972. Se trata de un modelo destinado al uso en circuito, requiriendo homologación para su utilización por carretera.
Su construcción resulta exquisita y es difícil imaginar un nivel de exclusividad mayor que el exhibido por esta máquina. Los chicos de Radical Ducati no se han limitado a mejorar un modelo preexistente, sino que han ensamblado un modelo único, escogiendo las piezas adecuadas de entre un amplio abanico de posibilidades. El chasis es de fabricación propia, siguiendo las especificaciones de la Monster S4R. Realizado en acero al cromo-molibdeno, se complementa a la perfección con el basculante monobrazo de la misma S4R de la anterior generación Monster.
La suspensión trasera se compone del balancín de la S2R, un monoamortiguador Öhlins con precarga y sistema de regulación de altura basado en el de MV Agusta. En el tren delantero se ha montado la horquilla de la 749S con tratamiento TIN, sujeta al chasis mediante una tija en ergal.
Los frenos se han confiado, tanto los discos tipo Wave como las pinzas y la bomba, a la marca Discacciati (especialistas en sistemas de frenado de alto rendimiento), encargado de ponerle la brida a la potencia desatada por el propulsor proveniente de la 900ie, con árboles de levas de competición y admisión y escape optimizados. Con respecto a este último, la Imola Cafe Racer monta un sistema asimétrico (al estilo de la 750 Imola), con terminales Spark tipo megáfono.
Guardalodos en fibra de carbono, un depósito de agresivas formas y un asiento alto y estrecho, culminado por un colín inspirado en las máquinas de competición de los años 70', rematan la exquisita factura de un producto único. Radical Ducati permite elegir al cliente los componentes a montar en la RAD 02, con lo que la posibilidad de encontrar otra igual se convierte en algo prácticamente imposible.
Las imágenes hablan por sí mismas y a la vista de las fotos está el fino trabajo, que la gente de Radical Ducati lleva a cabo con cada una de sus criaturas.
El modelo que nos ocupa, la Imola Cafe Racer, forma parte de la gama RAD 02, en la que podemos encontrar Nakeds, Superbikes o como en este caso, una espectacular Cafe Racer homenaje directo de la mítica 750 Imola Desmo, con la que Paul Smart ganó la Imola 200 en 1972. Se trata de un modelo destinado al uso en circuito, requiriendo homologación para su utilización por carretera.
Su construcción resulta exquisita y es difícil imaginar un nivel de exclusividad mayor que el exhibido por esta máquina. Los chicos de Radical Ducati no se han limitado a mejorar un modelo preexistente, sino que han ensamblado un modelo único, escogiendo las piezas adecuadas de entre un amplio abanico de posibilidades. El chasis es de fabricación propia, siguiendo las especificaciones de la Monster S4R. Realizado en acero al cromo-molibdeno, se complementa a la perfección con el basculante monobrazo de la misma S4R de la anterior generación Monster.
La suspensión trasera se compone del balancín de la S2R, un monoamortiguador Öhlins con precarga y sistema de regulación de altura basado en el de MV Agusta. En el tren delantero se ha montado la horquilla de la 749S con tratamiento TIN, sujeta al chasis mediante una tija en ergal.
Los frenos se han confiado, tanto los discos tipo Wave como las pinzas y la bomba, a la marca Discacciati (especialistas en sistemas de frenado de alto rendimiento), encargado de ponerle la brida a la potencia desatada por el propulsor proveniente de la 900ie, con árboles de levas de competición y admisión y escape optimizados. Con respecto a este último, la Imola Cafe Racer monta un sistema asimétrico (al estilo de la 750 Imola), con terminales Spark tipo megáfono.
Guardalodos en fibra de carbono, un depósito de agresivas formas y un asiento alto y estrecho, culminado por un colín inspirado en las máquinas de competición de los años 70', rematan la exquisita factura de un producto único. Radical Ducati permite elegir al cliente los componentes a montar en la RAD 02, con lo que la posibilidad de encontrar otra igual se convierte en algo prácticamente imposible.
Las imágenes hablan por sí mismas y a la vista de las fotos está el fino trabajo, que la gente de Radical Ducati lleva a cabo con cada una de sus criaturas.
antonio (administrador)
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