La vuelta de Casey Stoner al mundial parece estar encontrando más trabas de las que parecían en principio.
Su presencia en el circuito portugués está confirmada, lo que no parece estar tan claro es si finalmente se subirá a la Desmosedici GP09. Las tensiones entre el equipo y el piloto lejos de amainar con la vuelta del australiano, parecen estar en su punto álgido.
Por un lado Marlboro sigue acosando al piloto con constantes preguntas sobre su estado y por los pormenores de su baja, Ducati ha exigido explicaciones a los médicos australianos que han tratado a Stoner para conocer los detalles de su tratamiento y además parece que habrían presionado al piloto para que su familia y allegados no hicieran declaración alguna sobre el estado y ánimos del piloto.
Todo ello ha molestado a Stoner que se siente acosado por su equipo y patrocinadores. Tampoco ha sentado bien al piloto australiano los reiterados intentos de Ducati por encontrarle un sustituto de cara a la próxima temporada: el intento de fichaje de Lorenzo para 2010 o la de Rossi en 2011, parecen haber hecho mucho daño a las relaciones entre Casey Stoner y la marca de Borgo Panigale.
Desde Ducati han declarado no saber a ciencia cierta si Casey podrá pilotar en Estoril, ya que no se encuentran seguros sobre su estado físico y anímico, declaraciones de la que numerosos medios extraen una lectura negativa, según la cual el piloto se encuentra bien y con ganas de regresar y es al equipo a quien no interesa que lo haga.
La solución a esta maraña de intrigas la encontraremos a partir del próximo jueves día 1, fecha en la que comenzarán las sesiones preparatorias de cara al Gran Premio de Estoril.
Su presencia en el circuito portugués está confirmada, lo que no parece estar tan claro es si finalmente se subirá a la Desmosedici GP09. Las tensiones entre el equipo y el piloto lejos de amainar con la vuelta del australiano, parecen estar en su punto álgido.
Por un lado Marlboro sigue acosando al piloto con constantes preguntas sobre su estado y por los pormenores de su baja, Ducati ha exigido explicaciones a los médicos australianos que han tratado a Stoner para conocer los detalles de su tratamiento y además parece que habrían presionado al piloto para que su familia y allegados no hicieran declaración alguna sobre el estado y ánimos del piloto.
Todo ello ha molestado a Stoner que se siente acosado por su equipo y patrocinadores. Tampoco ha sentado bien al piloto australiano los reiterados intentos de Ducati por encontrarle un sustituto de cara a la próxima temporada: el intento de fichaje de Lorenzo para 2010 o la de Rossi en 2011, parecen haber hecho mucho daño a las relaciones entre Casey Stoner y la marca de Borgo Panigale.
Desde Ducati han declarado no saber a ciencia cierta si Casey podrá pilotar en Estoril, ya que no se encuentran seguros sobre su estado físico y anímico, declaraciones de la que numerosos medios extraen una lectura negativa, según la cual el piloto se encuentra bien y con ganas de regresar y es al equipo a quien no interesa que lo haga.
La solución a esta maraña de intrigas la encontraremos a partir del próximo jueves día 1, fecha en la que comenzarán las sesiones preparatorias de cara al Gran Premio de Estoril.
varetta (administrador)
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