Honda hace un guiño al pasado con la nueva CB 1100 F, una de las estrellas del Salón de Tokio junto con la VFR 1200 F. La CB 1100 bebe de las fuentes de uno de los modelos más recordados y exitosos de Honda: la CB 750 de 1969.Se trata de una naked de aspecto y tecnología clásicos en la que prima la estética y un gran placer de pilotaje, ya que su ausencia de ayudas electrónicas y asistencias, combinadas con un esquema mecánico sencillo pero efectivo, eliminan cualquier filtro entre piloto y máquina.
A primera vista llaman la atención sus depuradas líneas, fruto de un intenso estudio de diseño inspirado en modelos clásicos de la marca. El gran depósito es alargado y de formas cuadradas como en los modelos de antaño, destacando también el minimalismo de su trasera que carece de colín propiamente dicho, ya que su gran faro posterior se ubica sobre un guardalodos metálico muy "vintage". La salida de escape es de bella factura. Se trata de un terminal de gran tamaño en acero inoxidable, con un esquema 4 en 1 que discurre bajo por el lado derecho.
Todos los detalles están diseñados para evocar las formas de la legendaria "cuarentona" CB 750; las tapas laterales del motor, los retrovisores, el sencillo faro delantero de forma circular ... Incluso se ha cuidado al máximo la reporducción de la instrumentación, cuyos relojes son montados sobre un fondo verde oscuro como ocurria en la 750.
En el apartado mecánico la nueva CB 1100 no huye de las influencias del pasado, montando soluciones técnicas de gran sencillez, sin alardes tecnológicos pero de eficacia probada. Las suspensiones están compuestas por una horquilla convencional en la rueda delantera, combinado con un simple sistema de amortiguadores laterales sin precarga en el tren trasero, que refuerzan aún más si cabe el aspecto retro de la moto. El chasis es un robusto doble cuna de acero que ha sido pintado en negro, al que va anclado un basculante tradicional.
El equipo de frenos se compone de doble disco delantero, mordidos por pinzas Nissin de anclaje simple y 4 pistones y un disco trasero con pinza de 1 pistón, más que suficientes para detener con solvencia a la CB 1100.
En el motor lo primero que llama la atención es que vaya refrigerado por aire, lo que demuestra que Honda no pretendía hacer un simple homenaje estético a las motos de los 60', sino un auténtico "revival" de sus antepasadas. Se trata de un cuatro cilíndros en línea con doble árbol de levas en cabeza y 16 válvulas, que si bien destaca por su sencilla y robusta construcción, incorpora un sistema de inyección de combustible PGM FI, perfectamente afinado para reducir todo lo posible los consumos.
La gran cilindrada del conjunto busca obtener una potencia suficiente para moverse con soltura, sin obligar a la mecánica a trabajar a un alto régimen de giro. Así, el rendimiento queda en unos bien aprovechados 90 cv de potencia y 110 Nm de par motor, por debajo de las 9.000 revoluciones por minuto. De esta manera el comportamiento resultará muy vivo a bajo y medio régimen, con unos consumos y emisiones realmente bajos.
La instrumentación sigue la tendencia al minimalismo del resto de la moto, resultando sin embargo muy completo. Cuenta con dos grandes indicadores analógicos para el velocímetro y cuentavueltas entre los que se sitúa una pantalla digital LCD, con información de nivel de combustible, temperatura, cuentakilómetros y reloj horario.
La nueva CB 1100 viene a encuadrarse en el mismo nicho de mercado que la Triumph Thruxton o la Ducati Sport 1000 , motos poderosamente llamativas, sencillas y que proporcionan grandes dosis de diversión a sus mandos.
Por si fuera poco Honda ha presentado también un interesantísimo concept basado en la CB 1100 F, llamado CB 1100 Customize Concept y con el aspecto de una auténtica Cafe Racer. La Costumize se distingue por usar los colores tradicionales de Honda en competición (plata y rojo), incorpora un doble escape recortado en negro mate, asiento deportivo rediseñado, un bello cupolino cubre faro, así como amortiguadores traseros con precarga. Un atractivo prototipo que parece más que probable que llegue a producción en poco tiempo.
Mientras este proyecto llega a buen puerto, seguiremos esperando con impaciencia la comercialización de la CB 1100 F, que sin duda hará las delicias de los moteros más nostálgicos.
En el motor lo primero que llama la atención es que vaya refrigerado por aire, lo que demuestra que Honda no pretendía hacer un simple homenaje estético a las motos de los 60', sino un auténtico "revival" de sus antepasadas. Se trata de un cuatro cilíndros en línea con doble árbol de levas en cabeza y 16 válvulas, que si bien destaca por su sencilla y robusta construcción, incorpora un sistema de inyección de combustible PGM FI, perfectamente afinado para reducir todo lo posible los consumos.
La gran cilindrada del conjunto busca obtener una potencia suficiente para moverse con soltura, sin obligar a la mecánica a trabajar a un alto régimen de giro. Así, el rendimiento queda en unos bien aprovechados 90 cv de potencia y 110 Nm de par motor, por debajo de las 9.000 revoluciones por minuto. De esta manera el comportamiento resultará muy vivo a bajo y medio régimen, con unos consumos y emisiones realmente bajos.
La instrumentación sigue la tendencia al minimalismo del resto de la moto, resultando sin embargo muy completo. Cuenta con dos grandes indicadores analógicos para el velocímetro y cuentavueltas entre los que se sitúa una pantalla digital LCD, con información de nivel de combustible, temperatura, cuentakilómetros y reloj horario.
La nueva CB 1100 viene a encuadrarse en el mismo nicho de mercado que la Triumph Thruxton o la Ducati Sport 1000 , motos poderosamente llamativas, sencillas y que proporcionan grandes dosis de diversión a sus mandos.
Por si fuera poco Honda ha presentado también un interesantísimo concept basado en la CB 1100 F, llamado CB 1100 Customize Concept y con el aspecto de una auténtica Cafe Racer. La Costumize se distingue por usar los colores tradicionales de Honda en competición (plata y rojo), incorpora un doble escape recortado en negro mate, asiento deportivo rediseñado, un bello cupolino cubre faro, así como amortiguadores traseros con precarga. Un atractivo prototipo que parece más que probable que llegue a producción en poco tiempo.
Mientras este proyecto llega a buen puerto, seguiremos esperando con impaciencia la comercialización de la CB 1100 F, que sin duda hará las delicias de los moteros más nostálgicos.
antonio (administrador)
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